Este año fue un tanto complicado
y mi ESPIRITU NAVIDEÑO había mermado en los últimos tiempos debido a “esas cosas
que sorprenden en un momento cualquiera de la vida”.
Pero conectarme con el, nuevamente
me dio esperanzas y me ablando el corazón...(que de tantos golpes se había endurecido
un poquito).
Y saben que…?? Esta bueno “ponerse
blandito” de vez en cuando, porque te
conecta con el niño interior que el mundo adulto intenta ignorar, pero que es
tan necesario para darle INGENUIDAD, SIMPLEZA y ALEGRIA a la vida.
Por eso tome estas fotos de mi
mesa, con los adornos que utilice para armar mi árbol y asi conectarme con ese espíritu
que tenia cuando era pequeña, disfrutando junto a toda mi familia de los
preparativos de la Navidad.
Besos
y hasta la próxima
Veroka ♥